martes, 29 de noviembre de 2011

Las cartas que no te enviaré (Última).

Disclaimer: Katekyo Hitman Reborn! no me pertenece, ni sus personajes tampoco, son de Akira Amano yo hago esto sin animo de lucro, bla, bla, bla.

Personajes/Parejas: TYL!8059 (YamaGoku).

Advertencias: POV de Yamamoto y como el mamón es difícil de descifrar quizá algo de OoC -espero que no...-, en capítulos siguientes puede que ponga más advertencias. Tragedia.

Resumen: Después de diez años guardando todo lo que lleva dentro, Yamamoto Takeshi decide desahogarse de una forma muy común. Escribiendo cartas.

Música: Aqua Timez.

Séptima Carta: Pereza.

(Manchas de sangre, papel arrugado, letra temblorosa).

Hayato:

No tengo mucho tiempo y empiezo a sentirme demasiado cansado por la pérdida de sangre. Está misión que aparentaba ser rutinaria ha acabado siendo una trampa. No se cuantos hombres son pero teniendo en cuenta que sólo estamos Mukuro y yo aquí es poco probable que salgamos con vida. Lo siguiente que te voy a contar no tiene nada que ver contigo pero como sé que Rokudo es en el fondo un cotilla y que en cuanto vea tu nombre la va a empezar a leer te escribo a ti para pedirle un favor a él.

¿Por qué a él? Porque el conoce mi secreto, porque sé que él va a sobrevivir. Mala hierba nunca muere, ¿recuerdas? Será mejor que deje de enrollarme, no me queda mucho tiempo ya. Oigo las pisadas de los hombres de ese cabrón demasiado cerca y no sé si podré sobrevivir con las heridas que tengo. Necesito que quemes mis cartas, Mukuro, está es la séptima y hay seis más, que Hayato, no vas a ver.

Escribirle a dos personas es más complicado, ja, ja… yo (lo que sigue se encuentra borrado por la sangre).

Ah, sí, mis cartas… mis cartas se encuentran en mi cuarto, ¿menuda novedad, eh? La caja es sencilla, parece una simple caja de zapatos viejos, me refiero al lugar donde están escondidas. Tirad la caja, quemadla, entierradla conmigo si queréis pero no se os ocurra leerlas. Volveré del infierno si es necesario para (nuevos borrones de sangre), Mukuro.

Hayato. A pesar de todo, no me arrepiento de haberte querido, mi muerte ya va a ser de por si patética para que encima le añadiésemos el agravante de morir sin ni siquiera haber experimentado lo que es estar enamorado. Cuando mi vida solo era el béisbol acabe pensando que eso pasaría muchas veces. ¿Puedo pedirte un favor, Hayato?

Vive. Y asegúrate de ser feliz. No se te ocurra aparecerte por el infierno demasiado pronto. Adiós.

Te ama,

Yamamoto Takeshi.

Las cartas que no te enviaré (6).

Disclaimer: Katekyo Hitman Reborn! no me pertenece, ni sus personajes tampoco, son de Akira Amano yo hago esto sin animo de lucro, bla, bla, bla.

Personajes/Parejas: TYL!8059 (YamaGoku), nuevamente presente el X80.

Advertencias: POV de Yamamoto y como el mamón es difícil de descifrar quizá algo de OoC -espero que no...-, en capítulos siguientes puede que ponga más advertencias. Tragedia.


Resumen: Después de diez años guardando todo lo que lleva dentro, Yamamoto Takeshi decide desahogarse de una forma muy común. Escribiendo cartas.

Música: Aqua Timez.

Sexta Carta: Ira.

Querido Hayato:

Ya hay otra persona que sabe mi secreto, Xanxus. No puedo decir que me sienta orgulloso de cómo acabo enterándose. Aunque a su favor diré que se mostró más calmado de lo que esperaba. Debe ser por qué no soy él único que piensa en otra persona cuando lo hacemos ni que acaba gimiendo su nombre por error al correrse. Prácticamente me ha exigido que me confiese, textualmente ha dicho que: deja de ser tan gilipollas, basura. Acabarás perdiendo tu oportunidad si no te das prisa y entonces me reiré en tu cara de muñeca sucia y rota”. Ya, lo sé. No es precisamente alguien muy educado.

Pero sigue siendo Xanxus, y como es Xanxus y yo no quiero morir (aún) y sé que si le mintiese se me notaría en la cara (esto de tener una expresión honesta ya por inercia es horrible) le dije que me confesaría. Pero no le dije como. Supongo que ya puedes imaginar lo que vendrá a continuación, ¿no?

Hayato.

Te amo.

Y aunque no lo creas he estado dos malditas horas delante del papel intentando escribir esas dos malditas palabras. ¿Esto es frustrante sabes? Tener delante de tus narices a la persona que quieres a tu lado como más que un amigo y callar porque sabes que como abras esa enorme bocaza que tienes lo joderás todo. Tener que soportar las burlas de Xanxus y de Mukuro haciendo referencia a tu cobardía y no decir palabra porque sabes que no están diciendo nada falso.

Porque si te digo me gustas, me cruzarás la cara. Porque si te digo te quiero, te alejarás de mi. Porque si te digo te amo, no querrás volver a saber nada más del estúpido friki del béisbol.

Lo siento.

Creo que me he alterado un poco.

Cuídate,

Yamamoto Takeshi.

Las cartas que no te enviaré (5).

Disclaimer: Katekyo Hitman Reborn! no me pertenece, ni sus personajes tampoco, son de Akira Amano yo hago esto sin animo de lucro, bla, bla, bla.

Personajes/Parejas: TYL!8059 (YamaGoku), mención de X80 (Xanxus/Yamamoto).

Advertencias: POV de Yamamoto y como el mamón es difícil de descifrar quizá algo de OoC -espero que no...-, en capítulos siguientes puede que ponga más advertencias. Tragedia.


Resumen: Después de diez años guardando todo lo que lleva dentro, Yamamoto Takeshi decide desahogarse de una forma muy común. Escribiendo cartas.

Música: Aqua Timez.

Quinta Carta: Lujuria.

Querido Hayato:

Han pasado cuatro meses desde la última vez que escribí una de estas cartas. No es culpa mía, he estado ocupado durante todo este tiempo en misiones. ¿Ya lo sabes, no? Lo que le ocurrió a Squalo. Aunque Varia no quiera reconocerlo fue un duro golpe para su orgullo y para algo mucho más profundo que eso. Y te puedo asegurar que el más afectado por todo esto ha sido Xanxus. No te hagas el idiota, sabes de lo que hablo.

¿Por qué otra razón iba a reclamarme el líder Varia sino es porque Squalo fue mi tutor? Me ha visto luchar, conoce mis técnicas y sabe que a veces uso las que aprendí del difunto tiburón. Por otro lado, estar siendo pedido para realizar misiones con ellos empieza a ser agotador. No, más bien es como si sintiera que me quieren apresar. Como si quisieran que supliera el hueco vació que dejó el espadachín de cabellos plateados.

Bueno… Xanxus si me lo ha dejado bastante claro aunque no de la mejor forma. Es bastante… apasionado en la cama. ¿Ah? ¿Qué no te lo había comentado? Sí, se podría decir que padezco de eso que llaman bisexualidad (Xanxus también). No pienses nada raro, no es de él de quien estoy enamorado, sin embargo, su mirada me recordó horriblemente al reflejo que algún que otro día me devuelve el espejo y fui incapaz de rechazar su oferta de algo de sexo sin compromiso (tengo hormonas, ¿sabes?). Supongo que en cierto modo le recuerdo a Squalo y por eso me quiere cerca.

Debe creer que soy lo único que le ata al recuerdo de la persona amada.

Por supuesto, si ese bruto se enterará de que he dicho algo así me cortaría la cabeza con sus propias manos así que guárdame el secreto, ¿vale? Lo que iba diciendo, las misiones con Varia son estresantes y ya he perdido la cuenta de las veces que he sido herido. Aunque reconozco que no está mal sentir la lengua de Xanxus recorrer la sangre que se desliza por mi cuerpo pero… realmente me siento cruel con eso. En esos momentos cierro los ojos y pienso que es la lengua de quien amo la que me recorre.

Me siento un monstruo. Quizá lo soy.

Cuídate,

Yamamoto Takeshi.

sábado, 19 de noviembre de 2011

Las cartas que no te enviaré (4).

Disclaimer: Katekyo Hitman Reborn! no me pertenece, ni sus personajes tampoco, son de Akira Amano yo hago esto sin animo de lucro, bla, bla, bla.

Personajes/Parejas: TYL!8059 (YamaGoku), más adelante mención de otras.

Advertencias: POV de Yamamoto y como el mamón es difícil de descifrar quizá algo de OoC -espero que no...-, en capítulos siguientes puede que po


nga más advertencias. Tragedia.

Resumen: Después de diez años guardando todo lo que lleva dentro, Yamamoto Takeshi decide desahogarse de una forma muy común. Escribiendo cartas.

Música: Aqua Timez.

Cuarta Carta: Envidia.

Querido Hayato:

Hay algo que siempre he querido preguntarte. Puede que te parezca una pregunta que esté fuera de lugar e incluso puede que me mandes a la mierda pero es algo que necesito saber. Es complicado, para mí, escribir estas palabras así que puedes olvidarte de que te las pregunte directamente. Bueno… vamos allá.

Hayato, ¿te gusta Tsuna? Me refiero así te gusta en el sentido romántico. Quizá quieras estrangularme por insinuarlo pero el trato que le das, el cariño, la comprensión… Siempre preocupado por él, siempre ante poniéndole a los demás. No es una queja, cualquiera podría decir que yo hago lo mismo contigo. Tendría razón.

A veces me gustaría que me tratases un poco como a Tsunayoshi, ni si quiera que fuese de la misma forma (sé que antes te cortarías las manos) pero sí que te mostrarás menos distante conmigo. Soy un idiota, lo sé. Pero en estos diez años al menos he conseguido que dejes de odiarme y me consideres algo así como un amigo o al menos es lo que creo.

Me siento celoso.

Menudo guardián de pacotilla estoy hecho. Eres su mano derecha, es el Décimo Vongola, tenemos que protegerle y aún así… aún así yo…

Hayato, ¿puedo confesarte algo? Llevo algo así como siete años enamorado. Hey, hey, hey, guarda a Uri. No estoy hablando de Tsuna, él siempre ha sido mi amigo y siempre lo será pero nada más. Respecto a mis sentimientos, para mis desgracia, Mukuro los conoce pero eso es otra historia, demasiado larga (y desagradable).

A pesar de todo es un buen tipo, ha guardado mi secreto durante bastante tiempo. Es algo que le agradezco. Um… ¿de quién hablo? Probablemente ni te interese… pero da igual, no tengo valor para expresar ese sentimiento de ninguna forma. Sería hacerlo demasiado real.

Cuídate,

Yamamoto Takeshi.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Las cartas que no te enviaré (3).

Disclaimer: Katekyo Hitman Reborn! no me pertenece, ni sus personajes tampoco, son de Akira Amano yo hago esto sin animo de lucro, bla, bla, bla.

Personajes/Parejas: TYL!8059 (YamaGoku), más adelante mención de otras.


Advertencias: POV de Yamamoto y como el mamón es difícil de descifrar quizá algo de OoC -espero que no...-, en capítulos siguientes puede que ponga más advertencias. Tragedia.

Resumen: Después de diez años guardando todo lo que lleva dentro, Yamamoto Takeshi decide desahogarse de una forma muy común. Escribiendo cartas.

Música: Aqua Timez.

Tercera Carta: Gula.

Querido Hayato:

Hoy vi a Xanxus. Como puedes imaginar su presencia trajo unos cuantos recuerdos a mi mente. Por desgracia no son recuerdos agradables precisamente. Creo que ninguno de nosotros guarda buenos recuerdos de la batalla por los anillos. La presión, las heridas, la angustia… el miedo. Te equivocas si piensas que no lo tuve pero mi miedo no era provocado por mi combate. Yo temía que acabarais demasiado heridos. Y tú, maldito egoísta, tú casi cumples mi mayor horror casi matándote Por suerte Tsuna hizo que entraras en razón antes de que cometieras una locura. En ese aspecto creo que envidio a nuestro amigo.

Yo también soy egoísta, creo que ya te lo dije. Más de lo que tú crees.

Por ejemplo, durante tu combate contra Belphegor quise que aquella maldita “celda” desapareciese y sacarte de allí, aunque fuese a patadas. Me preguntó cual de nosotros dos tiene un egoísmo más… pronunciado. Quiero decir, también quise intervenir en otras ocasiones que no tenían que ver contigo. Cuando el pequeño Lambo se enfrentó a Levi. Era un bebé y aunque para mi todo aquello pareciese un juego… eso no significaba que no tuviese que controlar mi temperamento para no intervenir. Después de todo, aunque no lo comprendiese en aquel momento, la desazón de Tsuna era palpable.

Chrome, Ryohei. Ambos, en determinados momentos, me parecieron vulnerables. Claro que es bastante obvio quien fue el que peor lo pasó en aquel enfrentamiento, Tsuna. ¿Hibari? Es imposible que el pierda, y era algo que ya demostraba durante aquella época. No te traumatices, Tsuna era fuerte también, es fuerte y lo seguirá siendo por mucho tiempo. Aunque sigue preocupándose demasiado. No es algo demasiado grave. Como guardián suyo me encargaré de que sus temores no se cumplan. ¿No dices siempre que ese es nuestro deber?

Oye, Hayato, ¿sabes una cosa? Hay algo que quiero, algo que deseo con mucha más intensidad que cualquier otra cosa. También… es realmente horroroso anhelar lo que no tienes y más cuando sabes que si intentas obtenerlo lo perderás para siempre… junto a lo poco que hayas podido conseguir.

Cuídate,

Yamamoto Takeshi.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Las cartas que no te enviaré (2).

Disclaimer: Katekyo Hitman Reborn! no me pertenece, ni sus personajes tampoco, son de Akira Amano yo hago esto sin animo de lucro, bla, bla, bla.

Personajes/Parejas: TYL!8059 (YamaGoku), más adelante mención de otras.

Advertencias: POV de Yamamoto y como el mamón es difícil de descifrar quizá algo de OoC -espero que no...-, en capítulos siguientes puede que ponga más advertencias.

Resumen: Después de diez años guardando todo lo que lleva dentro, Yamamoto Takeshi decide desahogarse de una forma muy común. Escribiendo cartas.

Música: Aqua Timez.

Segunda Carta: Avaricia.

Querido Hayato:

Acabo de encontrar el álbum de fotografías que hice cuando era más joven y aunque no es que esté a rebosar de imágenes me ha entrado nostalgia al verlo. Hayato… ¿recuerdas como nos conocimos? Ya han pasado casi diez años de eso. Recuerdo que me pareciste una persona graciosa y algo (no te enfades) frágil. No me malinterpretes ni quieras matarme tan rápido y deja que te lo explique. Más que parecerme que fueras frágil fue algo así como una intuición, de todas formas es algo que deseche bastante rápido, ¿no es gracioso? Era un niño después de todo, no era capaz de ver lo que tu supuesta fortaleza escondía. Me refiero a tu fortaleza sentimental, así que guarda tus bombas.

Como te iba diciendo, al principio todo me resultaba muy gracioso. Estar con Tsuna, contigo, con Reborn, Lambo y los demás. Me hacía feliz. Cada vez nuestro pequeño grupo crecía más y más. Supongo que también te diste cuenta, ¿no? Nos habíamos convertido en una familia mucho antes de que todo el lío del Décimo Vongola se formalizara. Lo sé, lo sé, me estoy explicando realmente mal. Verás, lo que quiero decir con esto es que, a pesar de que cuando os conocí lo más importante para mi era el béisbol, en poco tiempo vosotros llegasteis a tomar el primer lugar en mi lista de prioridades.

Sí, Mukuro también. Después de todo, forma parte de nuestra familia.

A veces tengo miedo, ¿sabes? Miedo de no poder protegeros, miedo de… de ser lo suficientemente débil como para que tengáis que arriesgaros protegiéndome. Ya sé que no tienes tiempo de protegerme si estás pendiente del Décimo y también se que tienes esa típica expresión en tu cara de: “¡no te creas tan importante, idiota!”. Sé que no me protegerías pero está bien, en cierto sentido así es mejor porque yo sí voy a protegerte. Y de paso, protegiéndote a ti también protejo (indirectamente) a Tsuna.

Al menos pensando así no me siento un guardián tan inútil. Además, realmente me gusta que no tengas la necesidad de ponerte entre la muerte y yo. No soportaría que resultases herido por mi culpa. Supongo que no entiendes de qué te estoy hablando. No importa, por ahora todo está bien así.

Cuídate,

Yamamoto Takeshi.

martes, 15 de noviembre de 2011

Las cartas que no te enviaré.

Disclaimer: Katekyo Hitman Reborn! no me pertenece, ni sus personajes tampoco, son de Akira Amano yo hago esto sin animo de lucro, bla, bla, bla.

Personajes/Parejas: TYL!8059 (YamaGoku), más adelante mención de otras.

Advertencias: POV de Yamamoto y como el mamón es difícil de descifrar quizá algo de OoC -espero que no...-, en capítulos siguientes puede que ponga más advertencias.

Resumen: Después de diez años guardando todo lo que lleva dentro, Yamamoto Takeshi decide desahogarse de una forma muy común. Escribiendo cartas.

Música: Aqua Timez.

Primera Carta: Avaricia

Querido Hayato:

Supongo que es un comienzo extraño ya que en persona jamás me atrevería a pronunciar tu nombre. Pero dado que está carta no llegará nunca a tus manos puedo concederme el pequeño capricho de llamarte así en estos escritos. Te preguntaras por qué estoy escribiendo una carta que no voy a entregarte. Bueno… ¿recuerdas la semana en la que Reborn decidió que sería bueno para nuestra salud mental que tuviéramos una pequeña charla con aquellos extraños psicólogos?

No sé que es lo que pudieron vuestros matasanos recomendaros. Tampoco he notado ningún cambio notable en vosotros. Aunque tampoco es que me sirviera a mi de mucho. Aquel hombre se pasó la mayor parte de la tarde paseando de un lado a otro de la pequeña habitación en la que nos habían metido y para rematar no paraba de murmurar cosas e ignorarme. Sin embargo, en determinados momentos pareció reparar en mí.

Recuerdo que me miró fijamente por unos instantes y que tras un rato me dijo, palabras textuales: “ya que eres un puto libro cerrado, deberías escribir cartas en las que plasmes tus sentimientos para desahogarte”. Reconozco que en un principió me quede sin saber como reaccionar a eso. De hecho, no me decidí a seguir su consejo hasta ahora.

Supongo que si estuvieras leyendo esto, ahora mismo estarías poniendo tu cara de: “¿y a mi qué?”, quizá te estrés preguntando por qué de entre todos los guardianes he decidido escribirte a ti. Eso tiene una explicación lógica aunque no lo creas, creo. Tampoco te impacientes, es la primera carta que te escribo. Además, esto es para ayudarme a mi mismo no para satisfacer tu curiosidad.

Ah… eso sonó terriblemente egoísta, ¿verdad?

Perdóname por las molestias que esto pueda causarte pero si esto me sirve para… bueno, te lo diré más adelante. Creo que está carta ya me esta quedando demasiado larga para ser la primera, ¿no?

Te veré más tarde.

Cuídate,

Yamamoto Takeshi.